
La soledad es un veneno que mata de a poco si no se le pone cura…
Comienza con síntomas como nostalgia y congoja por los momentos que se han vivido en compañía… luego le siguen los repentinos nudos en la garganta al presenciar situaciones que evocan esos recuerdos… o deseos de consuelo en un hombro amigo…
Continúa aquella desagradable sensación de inutilidad, a lo que le sigue el desgano y falta de motivación para todo lo que antes te movía…
Todo esto desemboca en depresión…y con ella la muerte en vida…
¿Para qué salir si no tengo con quién?, ¿Para qué cuidarme si a nadie importa como esté?, ¿Para qué vivir si es mero gasto de energía, tiempo y recursos, ya que no tengo por quien dar mi vida?
Pero no hay que olvidar que estamos aquí por algo…es cosa que nos propongamos encontrarlo, y nos demos cuenta que hay miles de personas que se sienten como nosotros, por que la madre sociedad nos impide salir y darle un beso a alguien si se nos da la gana, o pedir un abrazo a quien se nos ocurra… podríamos crear lazos… pero nos empeñamos en detenernos… en reprimirnos…
Habemos millones de personas en el mundo… ¿Por qué hemos de sentirnos solos? Miremos alrededor… siempre hay alguien esperando por ti…
Comienza con síntomas como nostalgia y congoja por los momentos que se han vivido en compañía… luego le siguen los repentinos nudos en la garganta al presenciar situaciones que evocan esos recuerdos… o deseos de consuelo en un hombro amigo…
Continúa aquella desagradable sensación de inutilidad, a lo que le sigue el desgano y falta de motivación para todo lo que antes te movía…
Todo esto desemboca en depresión…y con ella la muerte en vida…
¿Para qué salir si no tengo con quién?, ¿Para qué cuidarme si a nadie importa como esté?, ¿Para qué vivir si es mero gasto de energía, tiempo y recursos, ya que no tengo por quien dar mi vida?
Pero no hay que olvidar que estamos aquí por algo…es cosa que nos propongamos encontrarlo, y nos demos cuenta que hay miles de personas que se sienten como nosotros, por que la madre sociedad nos impide salir y darle un beso a alguien si se nos da la gana, o pedir un abrazo a quien se nos ocurra… podríamos crear lazos… pero nos empeñamos en detenernos… en reprimirnos…
Habemos millones de personas en el mundo… ¿Por qué hemos de sentirnos solos? Miremos alrededor… siempre hay alguien esperando por ti…
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