sábado, 5 de diciembre de 2009

La música y el señor dinero


Desde tiempos remotos que la música ha sido manipulada para que cada vez sea más de elite y que aunque ,se haga lo que se haga, nada sea lo suficientemente fuerte para mantenerla cerca del pueblo, lo cual es paradójico, ya que los géneros más exquisitos nacen de los suburbios y de los rezagados culturales.

Después que la más alta sociedad discriminaba a Ludwig Van Beethoven por sus escasos recursos, pasaron a llenar teatros y conciertos, llamándolo el seguidor de Mozart una vez que lo escucharon, y de ahí en más trataron de reivindicarse con la música manteniéndolo para que no muriera en pobreza como su más fuerte influencia, Wolfgang Amadeus.

En New Orleans, el Jazz nacía a finales del siglo XVIII y no era más que “música de esclavos”, “música de negros”. Hoy por hoy, el Jazz es uno de los más importantes estilos musicales y “El señor Don Dinero” lo sabe muy bien, y negocia con eso desde la cuerda más delgada hasta el bajo más espectacular, haciendo muy difícil que las personas puedan conseguir instrumentos apropiados para hacer Jazz. Y es que en la música los precios son absurdos e inhumanos, pues el Señor Don Dinero, supo hacer bien su trabajo.

Cuando en el siglo XX nace el rock n’ roll y a mediados de los 70’s las bandas de estadio, fue el día en que ya no había más nada que hacer. Los precios a los mega eventos se alzaban por las nubes y la gente sucumbía ante sus sueños de ver a sus ídolos (porque la música es idolatría pura). Nacen los tours mundiales, las súper bandas, y el deseo incontenible de estar cada vez más cerca de quienes hacían música.

Muy despierto a esto, el Señor Don Dinero ideó un plan malévolo: Explotar a la música y a los fans… pero con todo. Nacieron empresas de ventas de entradas, merchandising, promociones a conciertos, la industria musical empieza a producir y producir discos y “nambers wan”, nacen los vídeos musicales, NACE MTV (maldito el día)… Se llenó los bolsillos y aseguró a su descendencia Señor Don Dinero ¡bien por usted! Pero, ¿a que costo?

Siempre resignados y llenos de pesares, sin lo único que hacía un poco más feliz el triste pasar por la vida, la gente cayó bajo el filo cortante de la Espada de Oro del Señor Don Dinero… hasta que llegó un defensor… un joven, justo y valiente demócrata, su nombre: INTERNET.

Eran los años noventa, la gente abrió un poco los ojos con la muerte del Grunge y empezó a valerse por sí misma, a ser autodidacta, a utilizar herramientas al alcance, todo esto con el apoyo del joven Internet. Fastidiado de este entrometido muchacho, el Señor Don Dinero en un frenesí de ira lo atacó con su Espada de Oro, y llegaron a juicio en varias ocasiones por la descarga gratuita de material discográfico (recordemos en el 2000 el tropiezo de Metallica con la empresa Napster)

En los últimos años han sido constantes batallas entre Internet y el Señor Don Dinero, sitios como MySpace, Youtube y Purevolume, han inclinado la balanza para el Internet, pero aun no es capaz de romper la poderosa Espada de Oro: los precios a conciertos y el lucro indiscriminado de los sellos en el alza del material. En Chile la SCD ya optó por que lado luchar, nos queda a nosotros elegir, si ser consumidores de la cultura de masas, o ser defensores de la difusión de la cultura libre y gratuita (o en su defecto, moderada).

Por último, debo decir y exigir… BAJEN LOS PRECIOS PARA METALLICA EN CHILE LADRONES CONCHASDESUMADRE

1 comentario:

Diaboletta dijo...

ajajajja
no solo de metallica
de TODO
muerte a la canshavipzzzz