sábado, 8 de mayo de 2010

Una clásica historia de poder

Hay hijos de puta e hijos de puta, pero en esta historia, hay dos clases de hijos de puta: el weón BARSA y el AMAMA' ITO

El weón BARSA trabaja de garzón en un pub-restaurant de Viña. Llegó regalón al trabajo porque es amigo de los dueños y llegó con la prepotencia que caracteriza a los BARSAS. Acaparador de mesas que no respeta el tácito acuerdo de irse una mesa por medio, acuerdo que hace mucho más sostenible la relación entre trabajadores, pero que algunos gilipollas se meten por la raja, sabiendo de antemano que son intocables, por contar con la venia de sus patrones. Un hijo de puta, en toda la extensión de la palabra.

El AMAMA' ITO, por su parte, es uno de los dueños del local, el que acostumbrado a servirse a las jóvenes buenas mozas que pasan por allí, se le subieron los humos a la cabeza y se le achicaron los testículos, despidiendo a una de su trabajadoras, por no darle la pasá. La pica hace estragos en los hijos de puta y viéndose con algo de poder, no escatiman en usarlo a su conveniencia.

El muy hijo de puta se escudó en que la señorita que no quiso tener nada con semejante desecho de virtudes, tenía problemas con su amigo, el hijo de puta BARSA y acaparador de mesas, por lo tanto, se tenía que ir. El ego herido de un AMAMA' ITO no tiene reparos en recurrir a prácticas ancestrales de falocentrismo, por lo tanto, como buen macho herido, despidió a la chiquilla, ya que era la única forma de salvar su honor de mierda.

Estos personajillos existen y están más cerca de lo que imaginas, así que tú, chiquilla buena moza, cástralos con tu indiferencia, humíllalos con tu belleza, deslúmbralos con tu elegancia, pero no dejes que se acerquen; la mayoría de las veces, estos gilipollas son “churreteros” precoces, if you know what I'm saying...

(Basado en hechos reales)

P.D.: el término hijo de puta quizá esté mal utilizado, no quiero ofender a las putas dándoles semejantes hijos.

P.D.2: hijo de puta x 8.-

1 comentario:

PeriKa dijo...

Hay muchos hijos de puta ... está más que claro que hay que castrarlos, lamentablemente mucha gente no se hace el animo.